Al comienzo de la jornada, los mercados de materias primas mostraron una dinámica positiva: El crudo WTI subió por encima de los 65,5 dólares por barril y el oro subió inicialmente hasta los 3.390 dólares por onza. Sin embargo, esta subida de los precios del metal precioso no fue más que una corrección. En el trasfondo de la oleada de optimismo en los mercados, los operadores muestran interés por los activos con mayores rendimientos. El optimismo se debe tanto a los acuerdos comerciales como a la estabilidad de los resultados empresariales. El mercado del oro se vio sometido a la presión de las ventas y reanudó su descenso desde la zona que hemos descrito anteriormente: 2400-2450 $. Sin embargo, persisten los riesgos, tanto en términos de política arancelaria como de decisiones geopolíticas.