Los precios del oro cayeron más de un 1% el viernes y se disponen a romper una racha de nueve semanas de ganancias. La reacción del mercado puede deberse, entre otras cosas, a la reducción de las tensiones entre EE.UU. y China. La Casa Blanca confirmó que el presidente estadounidense, Donald Trump, se reunirá con el presidente chino, Xi Jinping, la próxima semana durante su viaje a Asia.
Los operadores también están a la espera de la publicación de los nuevos datos del índice de precios al consumo de EE.UU., y se espera que la cifra refleje un sólido crecimiento de los precios en septiembre.
Sin embargo, los mercados siguen asumiendo que la Fed recortará los tipos de interés en 25 puntos básicos en la reunión de la próxima semana.
Técnicamente, las cotizaciones se sitúan por encima de la zona de los 3950-4050 dólares, que actúa como soporte para el oro. Sin embargo, con la volatilidad potencialmente esperada, cualquier nivel en cualquier dirección podría ser superado.