La economía japonesa se contrajo menos de lo previsto. El principal motor de la revisión fue una mejora de las cifras de consumo. Sin embargo, esto se debió a la inclusión de nuevos datos sobre el sector de la restauración y el juego, lo que pone en duda la objetividad de esta evaluación. Los analistas creen que la revisión no cambia el panorama general: el crecimiento económico se está ralentizando. Además, persiste la incertidumbre debido a la política arancelaria estadounidense, especialmente la posible imposición de aranceles del 25% a los automóviles japoneses a partir de julio. Esto hace que las futuras negociaciones con Washington sean críticas para Tokio.No obstante, después de que el par USD/JPY subiera hasta 145,00, las cotizaciones reanudaron su descenso a principios de semana en medio del debilitamiento general del dólar estadounidense. El rango 142,00-143,00 sigue siendo una zona de soporte local.