En el mercado de divisas, el dólar se debilitó temporalmente frente al yen hasta el nivel de 145,00, lo que no deja de ser un descenso correctivo que se produjo tras la publicación de los datos de la inflación en Japón. El índice de precios al consumo subyacente mostró una subida del 3,7% en mayo, la mayor en más de dos años. Esto aumenta la presión sobre el Banco de Japón, que podría verse obligado a reanudar la subida de tipos a pesar de los riesgos que entraña para la economía la política arancelaria estadounidense. Los precios de los alimentos, especialmente el arroz y el chocolate, subieron un 100% y un 27% interanual respectivamente. No obstante, el mercado sigue valorando una subida de tipos sólo para diciembre, lo que indica que los inversores y el banco central se muestran cautos en medio de la incertidumbre de la política exterior.