Los precios del petróleo muestran una dinámica positiva por tercera semana consecutiva. Los inversores están preocupados por las posibles interrupciones del suministro a través del estrecho de Ormuz. Las acciones militares en la región y la incertidumbre en torno a la posición de EEUU alimentan la demanda de petróleo. Al mismo tiempo, los analistas señalan que aunque Washington posponga sus decisiones, el riesgo de una escalada se mantiene. Irán es el tercer productor de la OPEP, y cualquier restricción de sus exportaciones puede aumentar la presión sobre el mercado mundial de materias primas.Técnicamente, la zona de 74-75 dólares se ha convertido en una zona de resistencia. La aparición de un soporte en forma de actividad compradora es posible en torno a los 67,80 $, pero para sacar conclusiones es necesario esperar a la reacción del mercado.Además, conviene recordar que en condiciones de mayor incertidumbre, la transferencia de posiciones durante el fin de semana está asociada a riesgos adicionales.