Tras una nueva jornada de crecimiento de los índices estadounidenses en la víspera, los mercados asiáticos se movieron el jueves con moderación: los inversores contuvieron la respiración a la espera del informe sobre el empleo en Estados Unidos, que puede determinar la orientación de la política monetaria de la Reserva Federal. Se espera que la tasa de desempleo aumente hasta el 4,3%. Los datos del sector privado reflejaron el primer descenso del empleo en dos años, lo que causó alarma. Si el informe oficial confirma la debilidad del mercado laboral, la probabilidad de un recorte de tipos de la Fed en julio aumentará bruscamente, lo que provocará una subida de los bonos del Tesoro y un debilitamiento del dólar, que podría impulsar los índices estadounidenses a nuevos máximos. Los rendimientos de los títulos a 10 años y a dos años ya han caído. En medio de las críticas de Trump y la presión sobre la jefa de la Fed, los mercados se muestran cautelosos y sensibles a cualquier desviación en los datos.